RECUERDOS
Miguel Najdorf
Miguel Najdorf (cuyo nombre polaco original era Moisés Mendel Najdorf) (Varsovia, 15 de abril de 1910 - Málaga (España) 4 de julio de 1997), fue un jugador de ajedrez argentino de origen polaco, que alcanzó el título de Gran Maestro Internacional.
En 1930 ya era Maestro Internacional. Su tutor fue el gran jugador ruso nacionalizado polaco (y luego francés) Savielly Tartakower, a quien siempre se refirió como "mi maestro". En 1939, el inicio de la Segunda Guerra Mundial lo sorprendió en Buenos Aires, ciudad en la que se desarrollaba la VIII Olimpiada de Ajedrez, en la que representaba a Polonia. Siendo judío, interpretó correctamente los sucesos de su tiempo y decidió quedarse a vivir en la Argentina, y adoptar esa nacionalidad. Esta decisión le costo grandes pérdidas afectivas y personales.
A pesar de que no fue un jugador de ajedrez de tiempo completo —por muchos años se desempeñó en el negocio de pólizas de seguros— Najdorf fue uno de los mejores jugadores del mundo en los años cuarenta y cincuenta, y destacó en la modalidad de partidas simultáneas de ajedrez a ciegas. En octubre de 1943 estableció el primer record mundial de partidas simultáneas a ciegas en la ciudad de Rosario, en la sede del Círculo de Obreros, jugando contra 40 tableros (+36 =1 -3).
El anterior poseedor del record, George Koltanowski (quien jugó 34 simultáneas en Escocia en 1937), alegó que en el lugar no hubo representantes internacionales para verificarlo. Así que, el 25 de enero de 1947 en San Pablo, Brasil, y ante representantes internacionales Najdorf superó su propio record al enfrentarse a 45 tableros (+39 =4 -2) y 83 participantes que eran relevados a medida que se cansaban. La exhibición de simultáneas a ciegas comenzó el 25 de enero a las 21 y finalizó al día siguiente a las 19.40. La dimensión es tal en dicha exhibición que no es extraño afirmar que poseía una memoria realmente muy prodigiosa. En concreto, si se analiza la exhibición debe tenerse en cuenta que para Najdorf significó retener 1440 posiciones, 2880 escaques y cerca de 1800 jugadas.
Otro hecho a tener en cuenta fue una exhibición simultánea (pero no a ciegas como las anteriores mencionadas) que realizó en la ciudad de Bahía Blanca, Buenos Aires, Argentina, contra 222 tableros (202+ 12= 8-). Una anécdota interesante relata que Najdorf se encontraba de viaje y un pasajero se le acercó y lo saludo. Entablaron una plática pero lamentablemente Najdorf no podía recordarlo; sin embargo, el pasajero le relató que él participó en la mencionada exhibición simultánea y luego de que Don Miguel (Najdorf) le preguntase el tablero en el que tuvo participación, pudo recordar exactamente la partida y el momento en el cuál le dio jaque mate.
Najdorf: "Frente al tablero no existe el apellido, sólo cuenta la posición".
Batió su propio record de simultáneas en 1950, jugando contra 250 tableros (226+ 14= 10-).
En 1950, cuando la FIDE creó el sistema de títulos oficiales, fue uno de los jugadores a los que se reconoció con la categoría de Gran Maestro Internacional. Ese mismo año disputó el Torneo de Candidatos al título mundial, quedando en quinto lugar. Tres años después, en el Torneo de Candidatos de Zurich 1953 quedó sexto. Ganó importantes torneos como los de Mar del Plata (1961) y La Habana (1962 y 1964) y participó en varias Olimpíadas de Ajedrez representando a Argentina, consiguiendo como mejor resultado el segundo puesto en Helsinki (1952). A pesar de su edad avanzada participó en el encuentro de 1970 "URSS versus Resto del Mundo", consiguiendo un empate con el ex campeón mundial Mijaíl Tal. Murió en 1997 en Málaga, España.

La variante Najdorf de la defensa siciliana es llamada así en su honor. También realizó contribuciones a la teoría y práctica de otras aperturas, como la defensa india del rey. El virtuosismo de Najdorf en el ataque al rey se demuestra en la jugada siguiente, parte de un match aclamado por David Bronstein en su famoso libro, y que ganara el premio a la brillantez en el Torneo de Candidatos de 1953 contra el gran maestro soviético Mark Taimanov. 1. d4 Nf6 2. c4 g6 3. Nc3 Bg7 4. e4 d6 5. Nf3 o-o 6. Be2 e5 7. o-o Nc6 8. d5 Ne7 9. Ne1 Nd7 10. Be3 f5 11. f3 f4 12. Bf2 g5 13. Nd3 Nf6 14. c5 Ng6 15. Rc1 Rf7 16. Rc2 Bf8 17. cxd6 cxd6 18. Qd2 g4 19. Rfc1 g3 20. hxg3 fxg3 21. Bxg3 Nh5 22. Bh2 Be7 23. Nb1 Bd7 24. Qe1 Bg5 25. Nd2 Be3+ 26. Kh1 Qg5 27. Bf1 Raf8 28. Rd1 b5 29. a4 a6 30. axb5 axb5 31. Rc7 Rg7 32. Nb3 Nh4 33. Rc2 Bh3 34. Qe2 Nxg2 35. Bxg2 Bxg2+ 36. Qxg2 Qh4 37. Qxg7+ Kxg7 38. Rg2+ Kh8 39. Ne1 Nf4 40. Rg3 Bf2 41. Rg4 Qh3 42. Nd2 h5 43. Rg5 pero se rinde, pues no tiene defensa 43 ... Rg8.
Este es un buen ejemplo de aprender de los propios errores. Anteriormente ese año, Svetozar Gligoric había batido a Najdorf con una aplicación del mismo sistema.

Miguel jugando una partida a ciegas con Ernesto "Che" Guevara

El nivel de Ernesto Guevara era bastante fuerte, tanto así que en una simultanea a ciegas en 1949 en la ciudad de Mar del Plata, entabló con Miguel Najdorf, en la época en que el polaco era considerado uno de los mejores jugadores del mundo no rusos. Según Najdorf, Guevara era un jugador de primera categoría y muy agresivo; también proclive a cambiar en busca de posiciones favorables.
La partida antes referida es la siguiente:
Blancas: Miguel Najdorf – Negras: Che Guevara
Apertura Española.

1 e4 e5 2 Cf3 cc6 3 Ab5 a6 4 Aa4 Cf6 5 0-0 Ae7 6 Te1 b5 7 Ab3 0-0 8 c3 d6 9 h3 h6 10 d4 Te8 11 Cbd2 Af8 12 d5 Ce7 13 c4 bxc4 14 Cxc4 c6 15 dxc6 Cxc6 16 Ae3 Ae6, Tablas.

Recopilación de notas sobre la carrera ajedrecística de Miguel Najdorf

RELATO DEL GRAN ANATOLY KARPOV

"Una vez, el polaco-argentino Nadjorf, que jugaba un torneo de varios días de duración, vió derrumbado en un sillón del hotel al jugador contra el que se enfrentaba esa tarde. Quiso animarle y le invitó a una copa''. El deprimido ajedrecista aceptó encantado.
Después de una copa, vino otra y otra. Todas las pagó Najdorf. Su contertulio había resurgido, parecía otro. Nadjorf se sentía culpable, porque pensaba que su adversario, cada vez más colocado, jugaría esa tarde rematadamente mal.
No fue así. El "resucitado'', con claros signos etílicos, hizo una partida formidable y barrió del tablero a Nadjorf. Sorprendentemente, poco antes del remate, el beodo le pidió tablas. "¿Me pides tablas? No lo entiendo, la tienes totalmente ganada'', comentó Nadjorf sorprendido. "Es una manera de agradecerte las copas que me has pagado. Estoy sin blanca y yo, si no bebo, juego muy mal. Sólo las veo a partir del tercer whisky''.

JUEGO CON BLANCAS, GANO YO; JUEGO CON NEGRAS, GANO YO.

El trebejista (pseudonimo de un anonimo) relato...
"Tengo una anécdota muy buena que me sucedió con el viejo Zorro, el Grande Najdorf: Una vez tenía una partida suspendida con Hebert Perez por un Abierto del Círculo, y me acerqué a Don Miguel y le pedí una opinión de la posición en suspenso; luego de analizarla me preguntó: ¿Quién mueve?... -El negro maestro, le respondí. Refunfuñó y me dijo: -Esto está ganado por el blanco, -mientras me explicaba todos los agujeros que presentaba el negro y el ataque imparable del blanco hacía estragos en la débil defensa negra. -Creo que sí, pero yo juego con negras Don Miguel... -Ahhh!, entonces gana el negro. -¿No me dijo que ganaba el blanco maestro? -Ah ¿si?, ¿de que forma?, demuéstremelo. Entonces tomé la conducción de las blancas e intenté hacer todo lo que me había explicado en su análisis para reventar a las negras como el "Zorro" me había enseñado. ¡Sorpresa! Encontró una jugada con la que aparentemente el negro quedaba superior. Ese análisis me demostró que el blanco no ganaba, sino que el negro se quedaba con material de más y a la postre con ataque. -¡Qué grande maestro!, entonces gana el negro... le dije entusiasmado. -Depende.- me contestó, ¿de que manera?, juega con negras... Intenté con negras hacer la variante ganadora descubierta por Miguel, sucedió lo mismo que cuando jugaba con blancas, encontró una jugada que echaba por tierra todas mis esperanzas en la partida, y volvió a ganar con blancas. -Maestro, ¿quién gana, el negro o el blanco? -Depende, respondió con una carcajada, si juego con blancas, gana el blanco; si juego con negras, gana el negro. Los maestros que estaban presente en ese análisis: Atila de Leon, Bernardo Wexler, Carlos Guimard, Adolfo Miño, Jaime Emma, todos quisieron refutarlo con ambos colores. Siempre me quedó la duda si ganaba el blanco o el negro, lo cierto es que yo perdí la suspendida. Pero estoy seguro que si la hubiese jugado el viejo, la ganaba sin lugar a dudas, sin desmerecer la capacidad de Hebert. La posición la tengo guardada en mis archivos de partidas, pero nunca podré saber quien estaba mejor. La última imagen que ví de Najdorf fué esa noche, cuando se retiró me hizo un guiño y a modo cariñoso de chiste me dijo: -Juego con blancas gano, juego con negras gano.
De eso no me quedan dudas, "El Viejo Zorro era así". Esa noche y esa carcajada quedará en mi recuerdo, como lo más hermoso que he vivido en mi vida ajedrecística".

LA TARDE EN QUE MIGUEL SUFRIO 7 HORAS...

El 20 de marzo de 1952, en el Club de Ajedrez Capablanca, de la Habana, se puso en marcha la última rueda del Torneo Internacional "Cincuentenario de la República".
Marchaban punteros don Miguel Najdorf y Sammy Reshevsky, con 17,5 puntos en 21 partidas. A Najdorf le tocaba con quien iba último, R. Ortega y a Reshevsky con Eduardo Lasker, que andaba por la mitad de la tabla. No parecían compromisos muy difíciles, y así fue como Reshevsky ganó muy rapidamente al cumplirse la tercera hora de juego.
Para sorpresa de todos, Najdorf estaba en ese momento siendo sometido a un tremendo ataque, y Ortega había sacrificado un caballo en 5AR. Visiblemente nervioso, don Miguel se paseaba de un lado al otro del salón, y, además del ataque de Ortega, debía soportar las socarronas miradas de Sammy, que fumando su pipa no dejaba de observa la partida. También estaban en juego mil dólares, ya que al ganador le tocaban 2.500 y al segundo solo 1.500.
Al llegar a la jugada 28, Najdorf devuelve la pieza para aliviar su juego, y en la jugada 32 encuentra un bonito golpe, que va diluyendo el ataque blanco. A pesar de ello, la partida sigue "dura"... y hay que ganar porque tablas no alcanzan. Finalmente y luego de casi 7 horas de juego, Ortega inclina su rey, y una cerrada ovación del público saluda la victoria.
Najdorf, visiblemente agotado, pero feliz estrecha la mano de los aficionados.

EL DIA DEL MAGNATE DE LOS DIAMANTES por Sergio Markeluk

Durante una cena con Bent Larsen, Najdorf y su señora, el danés lo bromeába, diciéndole que él venía a jugar al ajedrez para olvidarse que en pocos días se tenía que operar. Fue entonces cuando Najdorf contó la siguiente historia que le sucedió en la Olimpíada de Haifa de 1976. El certamen ya estaba por finalizar y él tenía programado ir a Nueva York a visitar familiares. Recibió entonces una comunicación de una persona que no conocía, que la citó para una conversación muy importante en Tel Aviv.
Don Miguel acudió, sorprendiéndose al llegar al edificio, que era el mismo donde se filmó la película "El robo de un millón de dólares", al advertir la cuidadosa custodia y la estricta revisación que se efectuaba para permitir el ingreso. Al llegar a la oficina de ese señor, ya cayó en la cuenta de que se encontraba en uno de los centros de diamantes más importantes del mundo, y esta persona era un multimillonario, que lo hacía esperar un rato mientras realizaba importantes negocios. Don Miguel quedó atónito ante las "cifras" enormes, que se barajaban en los negocios con aquellas "piedritas", que estaban sobre una mesa.
Finalmente fue atendido y se le explicó el motivo de la cita. A este señor hacía poco tiempo que le había fallecido la esposa, y quería distraerse. Aprovechando la Olimpíada había indagado sobre los maestros que estaban y resolvió llamar a Najdorf, a quien formuló la siguiente proposición: "Deseo que se quede durante una semana a jugar partidas conmigo (a pesar de que soy un "chambón)". Don Miguel le contestó que no le era posible, ya que debía volar con urgencia a Nueva York. Finalmente el señor consiguió que se quedara un día, y le dijo:" logicamente le voy a pagar, ¿le parece bien 3.000 dolares?"
"¡Que iba a hacer!, tuve que aceptar", nos dijo Najdorf mientras Larsen y yo nos mirábamos sorprendidos.

LA MEMORIA DE NAJDORF

Una de mis grandes condiciones fue siempre la de poseer una gran memoria. Esto me ha permitido una vez obtener el record mudial de simultáneas a ciegas y muchas veces sorprendí a los especialistas memorizando grandes listas de números y objetos, y repitiéndolos luego en correcto orden sin errores.
A raíz de esto, quiero contarles algo que me sucedió. José María Carbone es un fuerte jugador de 1º categoría, y frecuentemente nos sentamos a jugar unos "pimpones".
El tiene sus propias ideas para jugar contra mis defensas favoritas, la India del Rey y la Benoni, que consisten principalmente en jugar CR2R y C3C. Generalmente lograba crearme algunos problemas en la apertura, y aunque yo ganara luego las partidas, no era precisamente por salir bien de los planteos.
Una tarde quise averiguar que decían los libros sobre esta línea, ya que hoy en día muchas dudas se resuelven con sólo consultarlos. Entonces: ¡Que sorpresa me llevé! El modelo recomendado correspondía al de la partida Ivkov-Najdorf, de la Olimpíada de la Habana, 1966.¡O sea que yo mismo había refutado la línea hace 14 años!, y no lo recordaba. Por una vez mi memoria me había traicionado.

ENTREVISTA A MIGUEL

­¿Qué siente al organizar sus torneos?
­Una gran alegría. Este es el octavo torneo que organizo dándole posibilidades a los muchachos. Nuestro ajedrez adelantó una enormidad. En ocho torneos conseguimos muchos Grandes Maestros. Por eso trato de escribir y organizar torneos, para devolverme a mi patria lo que yo he recibido. Mi familia, por tradición, lo seguirá haciendo...
­¿El ajedrez es popular en la Argentina?
­Es una pasión. El ajedrez despierta un gran entusiasmo que se lo ve no como en el fútbol en la cancha, sino cada uno con su tablero reproduciendo las partidas. Hace poco me brindaron una gran ovación en la cancha de Boca, y di suerte: ganó Boca 6­1 a Gimnasia y Esgrima...
­¿Qué significa el ajedrez para usted?
­Al ajedrez le debo mucho. Sigo siendo campeón del mundo de partidas a ciegas. He jugado 45 partidas sin ver, de las cuales gané 39, empaté 4 y perdí 2. Este récord no ha sido superado. Mi pasión máxima es el ajedrez después de mi familia, antes era al revés. El ajedrez es el reflejo de la vida.
­¿Y qué fue su vida, don Miguel?
­Todo el mundo ya conoce mi historia. Nací en Varsovia, estudié, tenía familia, esposa, hija, padre, madre, cuatro hermanos, vine una semana antes de la Segunda Guerra Mundial acá a Buenos Aires y perdí a todos mis seres queridos, no me quedó ningún pariente. Y el ajedrez me enseñó a perder, si hasta Kasparov perdió con las máquinas, je, je, je... No hay campeón que no sepa perder. Siempre dije que cada partida que pierdo se me cae un pelo, ¡imagínese cuántas partidas he perdido en mi vida!
­¿Y Argentina?
­Acá tuve la suerte de empezar de nuevo, aprender un idioma nuevo, adaptarme a una patria nueva. La mejor jugada que hice en mi vida fue quedarme en este país. Aquí formé mi hogar, tengo dos hijas, nietos... Significa que supe perder, pero que también tuve una vida muy feliz.

Vos todavía no aprendiste lo que yo ya me olvidé.

Ojalá ustedes se hayan divertido tanto como yo.

Miguel Najdorf