AEROMODELISMO
Iniciate
Si hemos decidido incorporarnos a esta apasionante actividad que es el aeromodelismo radiocontrolado, para empezar debemos acercarnos a la tienda de este ramo y/o al campo de vuelo más cercano a nuestro lugar de residencia.

Es importante el dejarse asesorar por aquellos ya iniciados. Vamos a precisar su consejo a lo largo del proceso que va desde la adquisición del modelo hasta su puesta en vuelo. El ir por libre nos puede llevar a cometer errores, a veces imperceptibles, que darían al traste con nuestras ilusiones.

El equipo ideal para iniciarse presenta una serie de requisitos: Modelo de ala alta con una envergadura de 140 a 150 cm., diseñado para un motor de 4 a 6,5 cc. de cilindrada y una radio, será en FM, de por lo menos 4 canales (elevador, motor, dirección y alerones opcionales). Es preferible que el tren de aterrizaje sea triciclo con la rueda del morro orientable.

No es precisa una gran sofisticación. El grado de acabado del kit irá en función de nuestra habilidad y la ayuda que podamos conseguir para su montaje.

El precio medio de un equipo completo de avión, emisora y motor puede rondar las 40 a 50.000 ptas.

Puntos a cuidar durante la adquisición:
El motor.- Vale la pena que sea de calidad pues nos seguirá siendo útil en nuestro paso a modelos de mayores prestaciones. Ver la facilidad de conseguir repuestos de esa marca. Asegurarse de que lleva bujía incorporada, en caso contrario adquirir una adecuada.

El equipo de radio.- Al menos de 4 canales, en FM. No es preciso sea el alto de gama con mezcladores, programación, reloj, etc. Si el modelo elegido es con alerones precisaremos 4 servos. Procurarse pilas recargables y su cargador adaptado a nuestro modelo de emisora.

El avión.- Adquirir los accesorios precisos para su total acabado y que no estén incluidos en el kit como depósito, conducciones de combustible, ruedas, bancada del motor, hélice y cono para ésta , todo ello adecuado al tipo de motor adquirido ( Ver tablas de hélices y tipos de combustible en la sección TALLER ).

Puntos de atención durante el montaje:
Bisagras.- Usar adhesivo de dos componentes ( Araldit, Nural, etc) cuidando no bloquear el eje de giro.

Superficies de cola.- El timón vertical y el estabilizador horizontal deben pegarse a escuadra entre ellos y a su vez vigilar que este último queda horizontal respecto al ángulo diedro que forman las alas, lo cual podremos apreciar observando el modelo desde su parte anterior.

Instalación de los servos y las transmisiones.- Este punto especialmente delicado debe ser supervisado por alguien con experiencia pues va a determinar la sensibilidad del modelo a nuestras órdenes y la docilidad y corrección de sus reacciones.

Instalación del motor.- Debemos asegurarnos el correcto apriete de la tornillería que sujeta la bancada y el motor con ella. Es el momento de comprobar los ángulos de incidencia del motor ( normalmente inclinado hacia abajo y a la derecha para corregir la tendencia a elevarse por la velocidad y desviarse a la izquierda por el efecto del par motor ).Comprobar que las conducciones de combustible no quedan estranguladas al paso de este. Asegurar el apriete de la hélice, nos puede ahorrar un buen susto.

Montaje del depósito.- Otro punto a supervisar pues condicionará de modo importante el regular funcionamiento del motor.

Instalación de receptor y baterías.- Acolchar con goma-espuma o similar ambos elementos y procurar su correcta ubicación dentro del modelo para conseguir un buen equilibrado del mismo y evitar su desplazamiento durante el vuelo. El interruptor y la salida de la antena deben colocarse en el costado opuesto al del escape del motor. Sujetar adecuadamente la antena que debe ir desplegada al máximo, ¡nunca cortarla!.

¡Vamos al campo de vuelo!:
Asegurarse de que no dejamos nada en casa, parece obvio pero..., ¡ja!. Las baterías han de estar bien cargadas. El combustible preparado. El sentido de desplazamiento de las superficies móviles, timón, elevador, alerones, rueda del morro y mando de gases y su amplitud han de ser correctos. El motor estará rodado, para lo cual habremos pedido ayuda competente por seguridad (una hélice girando a 12.000 r.p.m. puede hacer unas horribles heridas) y para familiarizarnos con la puesta en marcha y ajuste del motor.